lunes, 12 de noviembre de 2012

LA MENTE NORMAL ES EL CAMINO II

En cuanto al significado del nacimiento y de la muerte de la mente, y de su auténtica vacuidad, es como un claro espejo que refleja las imágenes: la mente es el espejo y los fenómenos las imágenes. Cuando la mente se apega a los fenómenos, se involucra en las causas y condiciones externas, originando el nacimiento y la muerte de la mente. Cuando no se apega a los fenómenos permanece en la auténtica vacuidad de la mente.

Los seguidores escuchan que es posible llegar a percibir la naturaleza búdica; los seres iluminados ven la naturaleza búdica con sus propios ojos. Cuando alcanzas la no-dualidad, los términos son los mismos, en esencia no se diferencian, aunque tengan diferentes usos. Lo que en un estado de ignorancia  se denomina consciencia, en un estado de Iluminación es llamado conocimiento; seguir el principio se denomina Iluminación, seguir las cosas se 
denomina ignorancia.

Vivir en la ignorancia es dejar de percibir la mente original. Estar iluminado significa alcanzar la mente original. Una vez iluminado, conservas este estado para siempre, sin caer nunca más en la ignorancia. Es como cuando sale el Sol, no se mezcla con la oscuridad; cuando emerge la luz solar del conocimiento y de la sabiduría, no puede subsistir la oscuridad de las aflicciones.

Cuando comprendes la mente y los objetos, las vanas ideas dejan de surgir. Cuando las vanas ideas dejan de surgir, reconoces lo no-creado. Posees lo esencial, ya no necesitas cultivar el camino ni sentarte a meditar. Dejar de cultivarlo y de meditar es la pura meditación de aquellos que han realizado la vacuidad.

Ahora bien, si verdaderamente comprendes este principio, con precisión, y en lugar de fabricar acciones vives una existencia según tu destino, satisfaciendo tus mínimas necesidades estés donde estés, disciplinando tu conducta cada vez más y acumulando acciones puras, mientras puedas continuar de ese modo, ¿por qué preocuparte por no haber alcanzado todavía el conocimiento?

Ma-tsu (709-788)
LAS ENSEÑANZAS DEL ZEN