sábado, 28 de noviembre de 2015

VOLAR


EL AMOR ES CLARIVIDENTE


Le preguntaron a Beethoven lo que quería expresar con la 3a. sinfonía, y el gran músico contestó: «Si yo pudiera expresar lo que significa con palabras, no necesitaría expresarlo con música». Sólo los sensibles son capaces de disfrutar de la belleza. Sólo los que tienen sentido del humor pueden comprender el aparente despropósito de la vida. Precisamente porque tenemos la palabra «Dios» y asociamos a esa palabra las ideas con las que nos han programado, somos incapaces de descubrirlo en la vida corriente y cotidiana, y en las personas que están pasando a nuestro lado. Los que aman la belleza son capaces de captar a Dios, porque aman la vida y las personas. Sólo el amor es clarividente. Cuando ya no te haga falta el agarrarte a las palabras de la Biblia, entonces es cuando ésta se convertirá para ti en algo muy bello y revelador de la vida y su mensaje. 

Lo triste es que la Iglesia oficial se ha dedicado a enmarcar el ídolo, encerrarlo, defenderlo, cosificándolo sin saber mirar lo que realmente significa. 

La mejor manera de acercarte a la verdad es que pases tiempo mirando el mar, el campo, la naturaleza y, sobre todo, que repares en las personas como seres nuevos, sin conceptos, sin memoria, y que las escuches desde adentro con tu corazón abierto de par en par, comprendiéndolas, amándolas: Esta es la mejor oración. Un día sentirás el asombro de haber estado prisionero de los conceptos y de tu «ego». Entonces verás lo bella que se te hace la Biblia que te acerca a la vida y no te aleja de ella ya. Entonces habrás encontrado la interpretación de la Biblia y, en ella, el manual para comprender mejor la vida. 

«Una vez había un cachorro de león que se perdió y se metió en un rebaño de ovejas. Creció allí y se creía una oveja como ellas. Pero un día un león adulto llegó por allí y las ovejas corrieron espantadas para ponerse a salvo y, entre ellas, el pequeño león también corrió asustado. Pero el león, que lo había descubierto, le da alcance y el cachorro asustado le dice: «¡No me comas, por favor!». Pero el león, sin decir nada, lo coge y lo arrastra hasta el borde de una charca y le obliga allí a que mire las dos imágenes reflejadas en el agua. El cachorro, al verse como en realidad era, como un león, despertó y, desde ese momento, ya fue todo un león».

Esto es lo que nos tiene que ocurrir a nosotros después de este curso: que despertemos para ver claramente que somos leones y no ovejas…

Extracto del libro:
La Iluminación es la Espiritualidad
Anthony de Mello
Fotografía de internet

jueves, 26 de noviembre de 2015

FIDELIDAD (las pruebas del amor)


Estudiando psicología comparada para encontrar raíces de la conducta humana en la conducta animal, observamos algunos hechos muy simbólicos que sirven para pensar en nuestros hábitos monogámicos. 

Estudiando cualquier especie nos encontramos con una norma: Cuando uno de los dos, el macho o la hembra, es mas agresivo que el otro, la comunidad se organiza en harenes. Por ejemplo entre los leones, donde el macho es mas agresivo que la hembra, cada macho se aparea con varias leonas que “le pertenecen”. Entre las arañas, en cambio, donde la agresiva es la hembra, sucede al revés, cada hembra tiene varios machos que le sirven. 

Ahora bien, si ninguno de los dos individuos de la especie es tendencialmente agresivo, entonces se organizan en comunidades. Todos los machos se relacionan sexualmente con todas las hembras y las crías pertenecen a la manada. Y cuando en una especie macho y hembra son agresivos, entonces el esquema tendencial es la monogamia.

Pensemos en nosotros. Traslademos este esquema a la raza humana.

Aquellas culturas donde el hombre detenta cierta agresividad y tiene un lugar hegemónico respecto de la mujer, por ejemplo en las viejas culturas de Oriente, tiene una estructura donde el hombre tiene varias esposas. Por el contrario, en el mito de las amazonas, donde la mujer guerrera tiene el papel hegemónico, son las mujeres las que sostienen harenes de hombres.

En los años 60, durante el movimiento hippie en el mundo, partidario de la no violencia, hombres y mujeres vivían en comunidad, los miembros del grupo tenían relaciones no excluyentes entre todos y los hijos pertenecían a la comunidad.

La mayor parte de la sociedad se apoya en estructuras sociales monogámicas. ¿Qué te parece que dice esto de nuestra agresividad?

Si yo necesito establecer que mi esposa es parte de mi territorio y mi esposa necesita establecer que yo soy parte del suyo, es razonable pronosticar que reclamemos la fidelidad de la monogamia.

Yo creo que se trata de una elección en cada momento, y que en este sentido no hay diferencia entre las mujeres y los hombres.

La fidelidad forma parte de nuestro desarrollo social, en esta cultura y en este momento es así, no me atrevo a asegurar que dentro de treinta años esto siga siendo vigente.

La palabra infidelidad viene de fidelidad y fidelidad viene de fiel y fiel de fe.

Fiel es el que tiene o profesa una determinada fe, por eso los creyentes de una religión se llaman fieles. El fiel de la balanza se llama así porque es digno de credibilidad, porque es fiel al peso. Fiel es el que cree, infiel el que no cree.

Cuando una señora tiene una aventurilla con un profesor de tenis, por decir algo, o con un señor cualquiera, llegado el caso se dice que es infiel.

Ahora, infiel quiere decir que no cree. ¿En que no cree?. No cree que en su vínculo de pareja pueda encontrar lo que está buscando. Esta es la infidelidad.

Infidelidad es no creer que vas a encontrar en el vínculo que tenés conmigo lo que estás buscando y que lo vas a buscar en otro lado.

El que es infiel no le es infiel al otro, sino a su vínculo de pareja.

A veces es cierto que no encuentro en mi relación de pareja lo que estoy buscando. Siempre tengo dos posibilidades: elegir renunciar por lo menos transitoriamente a lo que estaba buscando o elegir no renunciar y salir a buscarlo. En la segunda posibilidad tengo que correr el riesgo que implica no creer en la pareja que armé.

Cuando mi abuela decía: “Busca afuera el marido lo que no encuentra en su nido”, todos nos reíamos, nos parecía una chochera de la vieja. Y hoy, medio siglo después, me encuentro diciendo casi lo mismo...

Tanto un hombre como una mujer salen a buscar fuera del matrimonio, o fuera de la pareja, cuando creen que obtendrán algo que suponen que no pueden encontrar en su vínculo actual (a veces ese “algo” es pasión, romance y aventura, pero otras es peligro, novedad y juego). 

La salida de buscar lo que me falta en otro no suele ser la salida que soluciona.

Extracto del libro:
El Camino del Encuentro
Jorge Bucay
Fotografía  tomada de internet

EL AMOR Y EL TEMOR


miércoles, 25 de noviembre de 2015

LA MONTAÑA INTERIOR


Cuando se esta en absoluto silencio, no hay movimiento en la mente, uno se empieza a sentir como la gran cima de la montaña... nevada.

La montaña siempre ha atraído a los meditadores. Hay algo en las montañas: el silencio, la quietud, la absoluta inmovilidad... casi atemporalidad. La montaña se mantiene casi siempre permanente, y el modo en que se yergue representa una forma de centrarse. Como si la montaña se hallara en una profunda situación de centrarse, todo se centra hacia dentro. Buda sentado bajo un árbol parece una montaña. Y no es fortuito que las primeras estatuas que se realizaron en el mundo fueran de Buda y estuvieran hechas en piedra piedra: una roca, inmóvil, atemporal, inmortal, centrada en sí misma.

El movimiento de la mente crea desdicha. El movimiento de la mente es pensamiento, deseo, imaginación, memoria, y todas estas cosas crean desdicha. Cuando no hay movimiento del pensamiento y del deseo, la mente ha desaparecido. Tú eres, pero no hay mente en ello. Ese estado de no-mente te brindará la percepción de la montaña interior.

Extracto del libro:
DÍA A DÍA
Osho
Día 311
Fotografía tomada de internet

LA VIDA ACTUAL


martes, 24 de noviembre de 2015

ACTITUD/APTITUD


La debilidad de actitud se vuelve debilidad de carácter.
Albert Einstein

Tendemos a priorizar la aptitud sobre la actitud, pensando muchas veces que las aptitudes o las capacidades de una persona son más importantes que sus actitudes, lo cual no puede estar más equivocado.

Nacemos con una serie de aptitudes que cabe desarrollar y mejorar con el tiempo. Estas pueden ser físicas o intelectuales, pero lo que nos lleva a tomar ciertas decisiones y a crecer es nuestra actitud ante la vida.

Según un estudio realizado en la Universidad de Harvard, de las personas que habían logrado alcanzar sus metas, el 85% de ellas se lo debían a la actitud y el 15% de las mismas a sus aptitudes. Resumiendo: para alcanzar nuestros sueños es imprescindible una actitud adecuada. Una disposición comprometida y positiva ante la vida nos proporciona energía y recursos para enfrentarnos a los problemas. Esta actitud constructiva nos lleva a la acción y nos ayuda a realizar cualquier proyecto.

La buena actitud sumada a la aptitud da resultados más que excelentes.

Tomado del libro:
Einstein para despistados
85 soluciones atómicas para problemas 
relativamente graves
Allan Percy
Fotografía de Internet

LA VIDA ES UN ARTE


lunes, 23 de noviembre de 2015

LAS METAS*


Nadie alcanza la meta con un solo intento, ni perfecciona la vida con una sola rectificación, ni alcanza altura con un solo vuelo. Nadie camina la vida sin haber pisado en falso muchas veces.

Nadie recoge cosecha sin probar muchos sabores, enterrar muchas semillas y abonar mucha tierra. Nadie mira la vida sin acobardarse en muchas ocasiones, ni se mete en el barco sin temerle a la tempestad, ni llega a puerto sin remar muchas veces.

Nadie siente el amor sin probar sus lágrimas, ni recoge rosas sin sentir sus espinas. Nadie hace obras sin martillar sobre su edificio, ni cultiva amistad sin renunciar a sí mismo. Nadie llega a la otra orilla sin haber hecho puentes para pasar. Nadie deja el alma lustrosa sin el pulimento diario de la vida.

Nadie puede juzgar sin conocer primero su propia debilidad. Nadie consigue su ideal sin haber pensado muchas veces que perseguía un imposible. Nadie conoce la oportunidad hasta que esta pasa por su lado y la deja ir. Nadie encuentra el pozo del placer hasta caminar por la sed del desierto.

Pero nadie deja de llegar, cuando se tienen la claridad de un don, el crecimiento de la voluntad, la abundancia de la vida, el poder para realizarse y el impulso de sí mismo. Nadie deja de arder con fuego dentro sin antes saber lo que es el calor de la amistad. Nadie deja de llegar cuando de verdad se lo propone.

Si sacas todo lo que tienes y confías en ti, esfuérzate, ¡porque lo vas a lograr!

_________
* Contribución anónima, vía Internet.

Extracto del libro:
La culpa es de la vaca 1a parte
Lopera y Bernal
Fotografía de Internet

¿TODO ESTÁ BIEN?


domingo, 22 de noviembre de 2015

LA «FOBIA AL AMOR» Y LAS MALAS SEPARACIONES


La siguiente frase de Stendhal siempre me ha impactado por su belleza y realismo: «El amor es una bellísima flor, pero hay que tener el coraje de ir a buscarla al borde de un precipicio». Amor de valientes. El amor se suda y se lucha, se fabrica y se construye en el día a día. Por lo tanto, si eres de aquellas personas melindrosas y ultrarrománticas, tendrás una resistencia mínima a los embates amorosos. Entre el calvario de los que creen que el amor está hecho para sufrir y la ingenuidad de los crédulos afectivos, se encuentra el amor realista. El amor de pareja no es de color de rosa, por más que quieran pintarlo así: hay momentos buenos y malos que habrá que aprender a superar. Si los comportamientos y las actitudes negativas sobrepasan la raya roja, tienes que irte; si se mantienen dentro de lo aceptable y están patrocinados por un amor sólido, sigues adelante. El amor crece y se desarrolla.


Hay personas que se curten de la experiencia amorosa y aprenden a regular algunos aspectos del amor sin traumatizarse, y hay otras a quienes el dolor del pasado les produce un condicionamiento de aversión que las inmoviliza e impide tener relaciones satisfactorias por miedo a sufrir. La idea que se esconde detrás de esta evitación generalizada es: «Si fracasé una vez, volveré a hacerlo» o «¡Ya he sufrido demasiadas veces por amor, así que no quiero saber nada de la posibilidad de enamorarme!». Cansancio, hipersensibilidad y mecanismos de defensa, todos obrando a la vez.

En ocasiones, estas personas suelen asumir una falsa autonomía. Aparentemente están más allá del bien y del mal y disfrutando de una maravillosa independencia, cuando, en realidad, la soledad en la que se encuentran es una coraza protectora. Amorofobia: fobia al amor. Individuos que se mueren de las ganas de amar y ser amados, pero a la vez entran en pánico con la sola idea de volver a relacionarse afectivamente, porque temen equivocarse. Malas relaciones y/o malas separaciones: es tan importante saber elegir como saber cerrar adecuadamente un vínculo.

Extracto del libro: 
Manual Para No Morir de Amor 
Walter Riso
Fotografía de internet

EL VALOR DE LA VIDA


sábado, 21 de noviembre de 2015

NO PODEMOS PONERNOS DEL LADO DE NADIE


En Los Ángeles cuatro policías golpearon a un conductor negro hasta casi dejarlo sin vida. Los periódicos hablaron de este incidente en todas partes y todo el mundo quería ponerse de parte de alguien. Cuando ocurrió, quizá te pusieras del lado de la víctima golpeada, o puede que de los policías. Cuando juzgas la situación y te pones de lado de alguien, actúas como si estuvieras fuera del conflicto, como si no fueras el conductor negro golpeado o los cuatro policías. Pero al observar la situación con más profundidad, ves que eres la víctima golpeada y también los cuatro policías que la golpearon. La ira, el miedo, la frustración y la violencia están tanto en la persona que recibió los golpes como en los que la golpearon, y también está en nosotros.

Para comprender a los policías y ayudarles a sufrir menos, imagina que eres el esposo o la mujer de un oficial de policía. Al convivir con ella, sabes lo difícil que es la vida profesional de tu pareja, por eso cada mañana y cada noche deseas hacer algo para ayudar a transformar la ira, el miedo y la frustración que hay en ella. Y cuando eres capaz de ayudar a tu marido o a tu esposa a sufrir menos, la ciudad entera se beneficia, incluso los jóvenes delincuentes. Esta es la mejor forma de ayudar a la comunidad. Con inteligencia, visión interior y compasión, puedes evitar muchos accidentes.

Extracto del libro:
LA IRA (El dominio del fuego interior)
Thich Nhat Hanh
Fotografía de Internet

ENVIDIA E INFELICIDAD


viernes, 20 de noviembre de 2015

LA PRESIÓN FAMILIAR


Cuando decidas separarte sentirás el peso de los valores tradicionales, las premisas religiosas y posiblemente un duro señalamiento de parte de tu familia. Esta crítica externa a la libertad afectiva hace que mucha gente permanezca atrapada en relaciones imposibles de sobrellevar, simplemente porque creen que están haciendo lo correcto. No estoy haciendo una apología de la separación, pero nadie tiene el «deber» de ser infeliz: es la filosofía del martirio como virtud, que aún existe y deja secuelas.

En cierta ocasión presencié lo que podría llamarse una «insolidaridad de género» entre una paciente que quería divorciarse y su madre, que hacía todo lo posible para desalentarla. Veamos parte del diálogo que sostuvieron:

Paciente (entre lágrimas, suplicante) (P): Pero ¡mamá, ya te he dicho que no lo quiero, ya no lo quiero!

Madre (M.) [en tono amable, pero firme]: El amor va y vuelve...
P: ¿Y si no vuelve? El doctor me dijo que no veía opciones... ¡Además me en- gaña con su prima! ¡Tiene una amante!

M: ¿Y eso qué importa? Seguramente ya se le pasará... Ya sabes la historia de tu padre, los hombres son así... Pero tú eres la esposa legal, la madre de sus hijos... Debes guardar tu puesto... 
P: ¡No me ama! ¿Entiendes? ¡Me lo ha dicho en la cara, dice que no me soporta, que se quiere ir!

M: No se irá...
P: ¡No tenemos sexo hace seis meses! ¿Eso tampoco importa? 
M: No te casaste para eso...

Mi paciente, debido a una historia previa de carencia afectiva, buscaba el visto bueno de su madre, lo cual era imposible de lograr porque la señora se mantenía en una posición dominante y cerrada, y no parecía importarle mucho el bienestar de su hija. Después de muchos tiras y aflojas, mi paciente logró vencer los antiguos esquemas de dependencia y comprendió que no debía pedir permiso ni convencer a nadie para tomar sus decisiones vitales. Finalmente se separó y su madre la «perdonó», después de un año.

Extracto del libro: 
Manual Para No Morir de Amor 
Walter Riso
Fotografía de internet

EL SABOR DEL SABER


jueves, 19 de noviembre de 2015

LA SABIDURÍA ES DULCE


Sutra 48: la sabiduría es dulce

La sabiduría es dulce y también la libertad.
(Budha).

No gastes tu tiempo en cosas que son innecesarias. Piensa en lo esencial, en lo intrínseca y no te inquietes por lo accidental. ¿Ganas algo con gastar tu tiempo en pensar si hay o no Dios? ¿Infierno? ¿Cielo? El pensar en eso sólo te quita tu libertad, te empuja hacia la fe, y no te da nada a cambio. Se libre y piensa en lo de verdad necesario.

Extracto del libro:
Recopilaciones "Cuentos y Fábulas del Buda" 
Sri Deva Fénix
Fotografía de internet

ES TU DECISIÓN


En la mayoría de las culturas existe una curiosa contradicción en lo que respecta a las relaciones que se establecen entre amor y matrimonio: por un lado se recomienda a los cuatro vientos (casi es una exigencia) que el vínculo sea por amor, y por el otro, no se acepta el desamor como una causa válida de divorcio. No se entiende que, si el amor nos une, el desamor no pueda desunirnos. Se dirá que hay otras cuestiones por las que luchar (por ejemplo, compromisos, hijos, valores religiosos) y quizá sea cierto en algunos contextos, pero me pregunto qué sentido tienen esos «compromisos» si se carece de la energía principal que los mantiene vivos. ¿Los matrimonios por conven- iencia? No son por amor y todo queda claro desde el principio.

¿Qué opinas de esta declaración fervientemente amorosa y esotérica?: «Pro- meto amarte de aquí a la eternidad, en todos los planos astrales, en todas la dimensio nes existentes y en cada vida en que me reencarne». La manifestó un hombre enamorado de una mujer menor, que temblaba de placer al oír semejante exabrupto. ¿Qué juraba el hombre? ¿Cómo estaba tan seguro de que nadie más tocaría su corazón? Además, ¿cómo tener la certeza de que lo que hoy me agrada de él, dentro de veinte años no se vuelva insufrible? Podría intentarlo seriamente, como un héroe, pero no asegurarlo. La gente cambia, al igual que sus gustos y su motivación. Garantizar que uno jamás se enamorará de alguien más resulta demasiado presuntuoso para tomarlo en serio. Insisto: podemos activar un sistema de resistencia psicológica para defendernos de otros amores, pero jurar amor eterno es demasiado. Los compromisos deben hacerse sobre cuestiones que dependen de uno: «Intentaré ser fiel, seré respetuoso, no sacaré ventajas ni te explotaré, seré honesto y sincero...», en fin, actitudes de las que sí puedo hacerme cargo. Si el desamor no es motivo de separación y el com-promiso debe avalar una relación más allá de toda duda y sin atenuantes, tal como lo plantean algunas subculturas y grupos sociales, contraer nupcias es un camino sin retorno. ¡Prohibido desenamorarse, prohibido retractarse! Nada que hacer. No conozco a nadie a quien le hayan «anulado» el matrimonio por desamor, aburrimiento o tedio crónico.

La decisión de seguir o no con tu pareja es exclusivamente tuya: no entregues el poder a otra persona para que decida por ti. Tú eres el único o la única que sabe cómo es realmente tu relación y cuánto te afecta.

Extracto del libro: 
Manual Para No Morir de Amor 
Walter Riso
Fotografía de internet

LA MADRE DE LA INFELICIDAD


martes, 17 de noviembre de 2015

CREPÚSCULO



Marchas personas han entrado en la existencia a través del crepúsculo. 

En la India, la palabra sandhya -significa crepúsculo- se ha convertido en sinónimo de plegaria. Si te acercas a un hindú ortodoxo y está rezando, dirá: «Estaba en sandhya... realizaba mi crepúsculo». Cuando se produce un cambio... por la mañana, por la noche; cuando sale el sol, justo antes del amanecer, se produce un gran cambio. La totalidad de la existencia pasiva se vuelve activa. El sueño se quiebra, los sueños desaparecen. Los árboles, los pájaros, la vida por doquier, surge otra vez. Es una resurrección. Es un milagro cada día. Si te permites flotar con ello en ese momento, puedes alcanzar una gran cumbre.

Y el mismo cambio se produce otra vez cuando el sol se pone. Todo se aquieta, se serena. La existencia se ve impregnada de tranquilidad y de un profundo silencio. En ese momento, siempre que lo permitas, puedes alcanzar grandes profundidades. Por la mañana puedes alcanzar grandes cumbres; por la noche, grandes profundidades, y ambas son hermosas. Elévate muy alto o desciende muy profundo. De las dos maneras te trasciendes a ti mismo.

Extracto del libro:
DÍA A DÍA
Osho
Día 310
Fotografía tomada de internet

VIVIR ES UN ARTE


lunes, 16 de noviembre de 2015

UN SALTO CUÁNTICO EN LA EVOLUCIÓN DE LA CONCIENCIA


He tenido atisbos de este estado de libertad de la mente y del tiempo que usted describe, pero el pasado y el futuro son tan abrumadoramente fuertes que no puedo mantenerlos fuera por mucho tiempo. 

Eckhart Tolle:

El modo de la conciencia ligado al tiempo está profundamente incrustado en la psique humana. Pero lo que estamos haciendo aquí es parte de una transformación profunda que tiene lugar en la conciencia colectiva del planeta y más allá: el despertar de la conciencia del sueño de la materia, la forma y la separación. El fin del tiempo. Estamos rompiendo patrones mentales que han dominado la vida humana durante millones de años. Patrones mentales que han creado un sufrimiento inimaginable a gran escala. No estoy usando la palabra maldad. Es más útil llamarlo inconsciencia o locura. 

Esta ruptura del viejo modo de la conciencia, o más bien de la inconsciencia, ¿es algo que tenemos que hacer o que ocurrirá de todos modos? Quiero decir ¿ese cambio es inevitable?

Eckhart Tolle:

Eso es cuestión de perspectiva. Hacer y ocurrir son de hecho un mismo proceso; puesto que usted es uno con la totalidad de la conciencia, no puede separar las dos cosas. Pero no hay garantía absoluta de que los humanos lo hagan. El proceso no es inevitable o automático. Su cooperación es parte esencial de ello. De cualquier modo que lo mire, es un salto cuántico en la evolución de la conciencia, así como nuestra única oportunidad de supervivencia como raza.

Del libro:
El Poder del Ahora
Eckhart Tolle

PESADILLAS


domingo, 15 de noviembre de 2015

VALENTÍA


LA BIBLIA Y EL TELESCOPIO


Por eso os digo: ¡Cuidado al leer la Biblia!. Leerla con lógica, teniendo presente la cultura de las gentes que la escribieron, cuya iluminación que transmiten nada tiene que ver con el contexto desde donde la escriben. Una cosa es el mensaje y otras el tiempo y las formas. Hay que leerla con apertura, sin apegarte a las formas, sabiendo comprender su esencia. También a Jesús le rechazaron por hereje. Cuando leáis las Escrituras tened en una mano la Biblia y en la otra el telescopio.

Nota: De Mello hace alusión sobre el telescopio, por la negativa de la iglesia de hacer uso de él cuando Galileo se los pedía. Decían era dudar de dios.

Buscar siempre la verdad. La verdad es lo importante, venga de donde venga, si de la ciencia, si de Buda o de Mahoma, lo importante es descubrir la verdad en donde todas las verdades coinciden, porque la verdad es una. No se puede tener miedo a mirar por el telescopio. 

Hay muchos santos que, sin conocer la Biblia, se han encontrado con la realidad. El verdadero texto es la vida. La Biblia nos refiere la vida, y por ello es un medio, pero también es un mito, que trata de expresar lo inexplicable en palabras, en forma de historias, para que de ella saquemos el significado de la vida que es el mensaje de Dios.

Algunos mitos son históricos y otros no. La vida de Jonás no es histórica, la de Jesús sí. Nuestra mente humana no está preparada para ver la realidad de la vida y se queda en los conceptos que tratan de expresar el mensaje de esos mitos. La vida histórica de Jesús se ha convertido en un mito y hay que desmitificarla para recobrar la frescura de un mensaje que está vivo.

Dejar fuera de la Biblia los fanatismos, los límites culturales, costumbres y prejuicios del pueblo judío de aquella época.

Jesús, al celebrar la Eucaristía, toma el pan y el vino que era la comida corriente del pobre, lo más asequible en su país. En otros países tienen que importar pan y vino para celebrarla, ¿Por qué?. Unos jesuitas misioneros se escandalizaban porque unos orientales celebraran con pan de arroz y zumo de frutas, que era lo más asequible allí. ¿Qué es lo más importante, la esencia o la forma?. ¿El mensaje o el modo?. Distinguir lo esencial de lo adicional y no considerar los errores como verdades.

Einstein llegó a probar con la teoría de la relatividad que no siempre la distancia más corta entre dos puntos es la línea recta, sino que, en algunos casos, la curva puede acercar esos, puntos. Si tú ves una cosa clara y la experimentas necesitarás mucha valentía para demostrar algo que va en contra de las creencias generales aceptadas por la sociedad y por la religión. Te llamarán loco. Los científicos tienen la ventaja de poderlo demostrar, los iluminados sólo lo pueden vivir. Y, sin embargo, las teorías no curan y la fe sí.

Ambas pueden ser acertadas o equivocadas.

Hay que quitarles los aditamentos culturales y fanáticos para probar la verdad. Lo importante es mirar no al dedo, sino hacia dónde señala para descubrir la verdad. En eso nos es de gran ayuda la Biblia; que nos revela los datos y actitudes que nos acercan a la verdad.

Extracto del libro:
La Iluminación es la Espiritualidad
Anthony de Mello
Fotografía de internet

NI LAS CADENAS


sábado, 14 de noviembre de 2015

LO SE


DEMOSTRACIÓN (las pruebas de amor)


Uno de los temas que surgen cuando hablo de enamorarse, reenamorarse y amar de verdad, es la demostración, es decir, cuán demostrativo es el otro. 

Siempre digo que demostrar quiere decir probar sin lugar a dudas que algo es verdad. Si yo tengo que demostrarte es porque parto de la idea que vos no me creés, de lo contrario no hay demostración necesaria. 

Entonces pregunto: ¿Por qué tendría que demostrar que te quiero? ¿Para probártelo?. 

¿Quién es el que duda y necesita pruebas? 

Si vos sos el que no creés este es un problema tuyo, no un problema mio. ¿Por qué habría yo de demostrarte que te quiero?. 

Nadie “tiene que” demostrar nada. 

Borremos de la frase el verbo demostrar, porque suena terrible. 

Para mi, el reclamo de la demostración afectiva implica en si mismo un sinsentido. 

Si yo te dijera que tengo una cicatriz verde en la palma de mi mano, vos podrías creerme o no creerme. Si me creés, lo hacés antes de que abra la mano. Porque si me creés sólo cuando abro la mano y la pongo frente a tus ojos, entonces, le creés a tu vista, no a mi. Si yo tengo que demostrar que tengo una cicatriz verde en la mano, es porque no me creés, entonces te la muestro y luego vos pensás que me creés porque la viste. Pero seguís sin creerme, sólo le creés a tus ojos. 

Nadie te puede demostrar el amor, porque en la demostración le creés a lo que ves, al otro no le creés nada. Otro tanto pasa con la palabra mostrar, que presupone que no ves. 

Si de vez en cuando me decís te quiero para mostrarme que me querés, la verdad es que no me sirve, así que no lo hagas. Ahora, si vos me decís te quiero porque es lo que sentís, mas allá de demostrarme nada, por favor no dejes de hacerlo, porque quiero que sepas que me place escucharte. Y a pesar de mi placer nunca lo hagas en función de mi, hacelo en función tuya y de tu sentir o no lo hagas. 

No sirven los actos de amor dirigidos a que el otro se entere de que lo quiero. 

“Mirá que lindo lo que te regalé para tu cumpleaños, ¿viste cuanto te quiero?... 

Esta es una historia mezquina e irrazonable para conseguir que el otro devuelva con la misma moneda. 

Claro que me encanta que me quieran, que la gente se acerque y me diga te quiero, pero no para mostrarme que me quiere, sino porque siente ganas de decírmelo. Basta de la aprendida historia absurda de decir Te quiero para escuchar Yo también te quiero. 

“Tengo que acordarme de que tengo que comprar un regalo de aniversario, porque si no mi esposa va pensar que ya no la quiero mas”. 

(Agrego yo: Mas que pensar, se va a dar cuenta). 

Lo importante de toda relación interpersonal no es que yo te diga que te quiero, ni que te lo demuestre. Lo importante es si vos te sentís querido o no. 

Por eso propongo que la próxima respuesta que des cuando alguien te diga te quiero sea: 

Lo se. 

Cuando uno recibe esta respuesta del otro, siente que su sentimiento llega, no hay un eco enfrente, el otro lo registra. Y entonces uno cierra el círculo. 

Hay que explorar esto. 

Cuando otro me quiere y yo me siento querido, la sensación de satisfacción de ambos es grandiosa. El siente que lo percibo que lo registro, que, de verdad, lo que el siente es importante. 

También puede quererme y no ser capaz de actuar lo que siente. 

Hay gente que te manda flores todos los días y no te quiere nada. Y también hay gente que vive con otros que nunca han mostrado nada en toda su vida, y sin embargo se siente querida, gente que sabe que aunque el otro no haga las cosas que otros hacen, cuando lo mira a los ojos sabe.

Yo tengo un amigo entrañable que es un tipo de llamar por teléfono, de ocuparse y mostrar y actuar. Me siento muy querido.

Y yo, que por ahí no soy tan actuador de esas cosas o estoy mas ocupado, a veces me siento y le pregunto:

- ¿Vos sabés que yo te quiero mucho? Y el entonces me dice:
- Si, claro que lo se...Vos sos así, yo ya lo se.

Y no está precisando que yo le diga, que me acuerde de su cumpleaños y que le mande un regalo, porque la verdad es que no le hace falta a nuestro amor.

Cuando hago alguna de estas cosas, entonces el registra y agradece.

¿Puedo querer al otro y que el otro no me quiera?
¿Puede ser que a mi me importe mucho del otro y que al otro no le importe nada de mi?.
¿Por qué no?.

Tengo un paciente que, harto ya de que su novia lo despreciara y lo dejara plantado y se fugara los viernes a la noche, un día le dijo:

- Mirá, el viernes te espero en mi casa, si no venís esa noche no vengas mas porque me voy a suicidar. Entonces ella le dijo:

- ¡Pero no! ¿Cómo te vas a suicidar?. Escuchame...
- No hablemos mas. Si no venís, vas a enterarte de mi por los diarios.

El sábado a la mañana suena el teléfono en la casa de el. Mi paciente atiende.
- Hola - escucha

Era la novia
- Hola, no viniste – recrimina el

Pausa. Ella contesta

- ¡Como! ¿No te mataste?

Sucede cotidianamente no es forzoso ni obligatorio que al otro le importe lo que a mi me importa, o que al otro yo le importe tanto como el me importa a mi. Y hay que asumirlo..

Los suicidios relacionados con el amor no son pertinentes.

Se suicida por amor aquel que necesita tanto ser amado por el otro que no se quiere lo suficiente a si mismo. Se suicida por amor aquel que no puede soportar la idea de que la persona que tanto quiere no lo quiera.

El suicidio es en este caso una salida obviamente poco práctica y muy poco saludable. Pero el mayor problema es que la gente utiliza la amenaza suicida para joder al otro.

La idea de amenazar con el suicidio para hacer sufrir, esta protesta a lo Bonzo es una de las pelotudeces que todos deberíamos dejar de pensar.

“Mirá como me mortifico por vos” o ”Te quedás conmigo o salto por la ventana”, constituyen planteos nefastos.

¿Cuál es la ganancia si el otro no te va a querer para disfrutar con vos, sino para que no te mueras?. Se trata de un manejo de culpa. Y la culpa es un sentimiento inventado.

Estamos entrenados para tratar de manejar la conducta del otro. Si yo consigo que vos te sientas culpable, entonces estás en mis manos.

No hay que morir por el otro, sino vivir para disfrutar juntos...