Nunca creas en nada a menos que lo hayas experimentado. Nunca te formés prejuicios, aunque todo el mundo diga que es así, a menos que tú mismo te lo hayas encontrado.
En la India hubo un gran místico, Kabir, que decía: «Nunca creas en tus oídos... solo cree en lo que veas. Todo lo que has oído es falso. Todo lo que has visto es verdadero».
Esto habría que tenerlo siempre en cuenta, porque somos seres humanos y tendemos a pronunciar falacias. Formamos parte de este mundo loco, y esa locura está dentro de cada ser humano. No hay que permitirle que te abrume. Uno debe recordar continuamente. Y si se puede conseguir esto... Es arduo, porque los prejuicios son muy cómodos y fáciles; no hace falta pagar por ellos. La verdad es costosa, preciosa, y hay que pagar mucho. De hecho, debes poner tu vida en juego. Entonces llegas a ella. Pero solo la verdad libera. Así que al observar a otras personas y el funcionamiento de sus mentes, recuerda siempre que el mismo tipo de mente también está oculto en ti.
Así que nunca le prestes atención. Te convencerá; discutirá, tratará de convencerte. Simplemente dile: «Lo veré por mí mismo. Todavía estoy vivo. Puedo encontrar todo lo que sea necesario».
Del libro:
Día a Día
Osho
Día 134