domingo, 13 de julio de 2014

«POR FAVOR, AYÚDAME»


La tercera frase sigue a las anteriores de forma natural: «Por favor, ayúdame. Cariño, necesito tu ayuda». Éste es el lenguaje del verdadero amor. Cuando estás enojado con la otra persona, tiendes a decirle lo contrario: « ¡No me toques! ¡No te necesito!

¡Puedo arreglármelas sin ti!». Pero habéis hecho la promesa de cuidar el uno del otro.

Es muy natural que cuando sufres, aunque sepas cómo practicar, necesites aún que la otra persona te ayude en tu práctica. «Cariño, necesito tu ayuda. Por favor, ayúdame.»

Si puedes escribir o decir estas tres frases, significa que eres capaz de amar de verdad y estás usando el auténtico lenguaje del amor. «Cariño, sufro y quiero que lo sepas. Cariño, estoy haciendo todo lo que puedo. Estoy intentando no culpar a nadie, ni siquiera a ti. Ya que estamos tan cerca el uno del otro, ya que nos hemos hecho una promesa, siento que necesito tu ayuda para salir de este estado de sufrimiento y de ira.»

«Cariño, estoy enojado, estoy sufriendo».
«Estoy haciendo lo que puedo».
«Por favor, ayúdame. Cariño, necesito tu ayuda».

Si usas estas tres frases para comunicarte con la otra persona, se tranquilizará y se sentirá aliviada enseguida. La forma en que manejas tu ira le inspirará mucha confianza y respeto, y también te lo inspirará a ti, y además no es demasiado difícil de hacer. 

Extracto del libro:
LA IRA (El dominio del fuego interior)
Thich Nhat Hanh