viernes, 4 de septiembre de 2015

CUANDO YO LLEGO TÚ YA TE VAS


Cada cosa en su tiempo. Argumentos para poner la edad en su sitio.

4. CUANDO YO LLEGO TÚ YA TE VAS

Lo he visto en mis consultas infinidad de veces. Dos energías dispares y encontradas.

Él se cansa rápido y ella es insaciable: los cincuenta no son igual que los treinta 
y pico. O viceversa: él es feliz comprando ropa y luciendo su cuerpo escultural y ella lo 
acompaña de compras, hasta donde puede y quiere: los cuarenta no son igual que los 
sesenta y pico. Ni que decir tiene de las metas existenciales. Uno de los dos quiere 
estudiar una nueva carrera y el otro está a punto de jubilarse. Ella monta en bicicleta, 
hace aeróbic y levanta pesas; él juega al golf, a duras penas. El joven marido quiere 
que hagan inversiones arriesgadas, mientras ella quiere ahorrar todo debajo del colchón.

La discrepancia en los ciclos se hace evidente en las necesidades y la intensidad 
con la que se persiguen los objetivos de vida. No es una ley general, hay excepciones y 
muchos superan las diferencias, pero existen. Repito: amar es una cosa, y convivir otra 
muy distinta; amor de alma y amor de convivencia. Si tienes sueños jóvenes que realizar 
y tu pareja lo que quiere es dormir la siesta, revisa toda la relación. 
Sacúdela y 
ponte firme, no vaya ser que se te contagien los bostezos.

Extracto del libro: 
Manual Para No Morir de Amor 
Walter Riso
Fotografía de internet