lunes, 29 de agosto de 2016

EL DESAFÍO DE LO SALVAJE


Esto no es más que un comienzo. Tendrás que pasar por tierras cada vez más extrañas. La verdad es más extraña que la ficción. Pero se valeroso.

Antes de que empieces a entrar en tu interior, no sabes cuánto de ti nunca te fue conocido. Vivías con solo un fragmento de tu ser. Vivías como una gota de agua y tu ser es como un océano. Te identificabas únicamente con la bola del árbol cuando todo el árbol te pertenece.

Sí, es muy extraño porque uno empieza a expandirse. Hay que absorber nuevas realidades. En cada momento hay que encarar hechos que nunca antes se habían visto, de modo que en cada momento hay una perturbación y el caos se vuelve algo continuo. Nunca te puedes asentar. Nunca puedes volverte seguro, porque, ¿quién sabe qué se te abrirá al siguiente momento?

Por eso las personas nunca van dentro. Llevan una vida asentada. Han despejado una pequeña tierra de su ser y erigido su casa allí. Han cerrado los ojos, alzado grandes vallas y paredes, de manera que piensan: «Esto es todo». Y justo más allá de la pared está su ser real y salvaje esperándolos. Ese es el desafío, el desafío de lo salvaje.


Extracto del libro:
DÍA A DÍA
Osho
Día 364
Fotografía tomada de internet