lunes, 8 de junio de 2020

COMIENZO


Este es el momento de embarcarse.
Todos los signos auspiciosos están en su lugar.

Al comienzo, todas las cosas son esperanzadoras. Nos preparamos para comenzar de nuevo. Aunque nuestra atención pueda estar en el magnífico viaje que se avecina, todo está contenido en ese primer momento: nuestro optimismo, nuestra fe, nuestra resolución, nuestra inocencia.

Para comenzar, debemos tomar una decisión. Esa decisión es el compromiso con el diario auto cultivo. Debemos hacer una fuerte conexión con nuestro yo interior. Los asuntos externos son superfluos. Solos y desnudos, negociamos todas las tribulaciones de la vida. Por lo tanto, nosotros solos debemos hacer algo de nosotros mismos, transformándonos en instrumentos para experimentar la más profunda esencia espiritual de la vida.

Una vez que tomamos nuestra decisión, todo vendrá a nosotros. Los signos auspiciosos no son una superstición, sino una confirmación. Son una respuesta. Se dice que si uno elige rezarle a una roca con suficiente devoción, incluso esa roca vendrá a la vida. Del mismo modo, una vez que elegimos comprometernos con la práctica espiritual, incluso las montañas y los valles reverberarán al sonido de nuestro propósito.



Extracto del libro:
365 Meditaciones Tao
Fotografía tomada de internet