“Un árbol crece. Podemos cortarle todas las ramas excepto una y permitir que el árbol crezca sólo en una dirección. Será un árbol muy pobre, muy feo; a la larga, tendrá grandes dificultades, pues una rama solitaria no puede crecer por sí sola; sólo puede hacerlo en medio de una familia de ramas. Llegará necesariamente el momento en que la rama sienta que ha llegado a un tope más allá del cual no puede seguir creciendo. Para que un árbol se desarrolle realmente, debe permitírsele crecer en todas direcciones. Sólo entonces será rico y fuerte.
El espíritu humano debe crecer como un árbol: en todas direcciones…. ”
OSHO