viernes, 23 de noviembre de 2012

CONFUSIÓN

Desprendete de tus ideas fijas. Entonces podrás disfrutar más de la confusión. Y no te confundirá... será un caos creativo. Un hombre necesita un caos creativo en el corazón para dar nacimiento a danzantes estrellas. No hay, otra manera.

Si tienes ideas fijas, la vida te va a crear mucha confusión, porque la vida jamás cree en tus ideas. No deja de revolver las cosas. Interfiere con la gente. Hace trucos. No es como el salón en el que arreglas los muebles y todo sigue siendo igual. La vida no es un salón. Es un fenómeno muy salvaje. 

Y Dios es muy caótico. No es un ingeniero o un arquitecto, un científico o un matemático. Es un soñador, y en un mundo de sueños, todo está revuelto. 

Tu novio de pronto se convierte en un caballo... En un sueño, nunca discutes ni preguntas: «¿Qué ha pasado? ¡Hace apenas un momento eras mi novio y ahora te has transformado en un caballo!». En un sueño, aceptas. Ni siquiera surge la más mínima sospecha sobre lo que sucede, porque en un sueño no llevas tu idea. 

Pero despiertos te sería imposible ver que tu novio se está transformando en un caballo. ¡Y los novios se convierten muchas veces en caballos! La cara puede que siga siendo la misma, pero la energía es diferente. Entonces te sientes confusos. 

Realmente nunca me he encontrado con una persona confusa. Más bien, me encuentro con gente que tiene ideas fijas. Cuanto más fija la idea, más confusión habrá. 

Si no quieres estar confuso, desprenderte de la idea. No es que la confusión vaya a cambiar, pero no parecerá una confusión. Se trata simplemente de la vida, que está viva.

OSHO
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