domingo, 9 de agosto de 2015

TÉCNICA


El amor funciona; la técnica es solo una excusa. El terapeuta funciona, no la terapia. A veces, cuando hay un hombre como Fritz Perls, algo empieza a suceder. No es gestalt, es la personalidad del hombre: su tremendo coraje, su compasión. Intenta ayudar; trata de llegar hasta la otra persona.

Pero nuestra mente lógica dice que debe ser la terapia gestalt lo que ayuda; y esa ha sido la falacia a lo largo de los siglos. No es el cristianismo el que ayuda, fue Cristo. Y no tiene nada que ver con el budismo, fue Buda. Durante dos mil quinientos años la gente ha pensado que era el budismo lo que ayudaba a las personas. En absoluto, era Buda. Si Buda hubiera estado diciendo otra cosa, también eso habría sido de ayuda. Aunque hubiera dicho lo opuesto de lo que fuera que dijera, también eso habría ayudado. Era la fuerza vital de aquel hombre, su compasión y comprensión lo que ayudaron. 

Pero nuestras mentes de inmediato se aferraron a las técnicas, a lo superficial. Entonces esto se convierte en algo importante y perdemos contacto con lo principal, lo esencial. Y hay problemas: lo esencial no se puede enseñar, solo se puede enseñar lo no esencial. De modo que no podéis enseñarle a Fritz Perls... podéis enseñar gestalt. Fritz Perls acontece cuando acontece; ¡no hay modo de enseñar eso! Pero la sociedad quiere estar segura de algo, de manera que empieza a enseñar, y solo se puede enseñar lo no esencial. 

De modo que todas las enseñanzas van contra el maestro, porque este aporta lo esencial y la enseñanza enseña lo no esencial.

Extracto del libro:
DÍA A DÍA
Osho
Día 296
Fotografía tomada de internet