«Señor, perdónales, porque no saben lo que hacen», dijo Jesucristo. Cuando alguien comete un crimen y hace sufrir a los demás, es porque no sabe lo que está haciendo. Muchos jóvenes cometen crímenes sin saber, sin entender cuánto sufrimiento causa su violencia. Cada vez que cometen un acto de violencia, lo están cometiendo contra ellos mismos y los demás. Quizá crean que al hacerlo y expresar la cólera que sienten disminuirá su ira, pero sólo la acrecientan.
Cuando bombardeas a tu enemigo, estás bombardeándote a ti mismo, a tu propio país. Durante la guerra de Vietnam los estadounidenses sufrieron tanto como los vietnamitas. Las heridas que infligió la guerra fueron tan profundas en los estadounidenses como en los vietnamitas. Lo que hemos de hacer es poner fin a la violencia, y no lo lograremos hasta que no adquiramos la visión de que lo que estamos haciendo a otra persona, nos lo estamos haciendo a nosotros mismos. Los maestros han de enseñar a sus alumnos que cuando somos violentos, sufrimos, pero sólo con enseñarles esto no basta, deben ser más creativos. No hemos de ser dogmáticos en la forma de compartir nuestra visión con los demás, sino flexibles e inteligentes, y usar «los medios hábiles», porque son muy importantes. Un Gran Ser ha de tener habilidad para ayudar a los demás.
Extracto del libro:
LA IRA (El dominio del fuego interior)
Thich Nhat Hanh
Thich Nhat Hanh
Fotografía de Internet