La autoaceptación no es nada más que un cambio en la conciencia. Solo exige un cambio de mentalidad. Si se te cae el cabello, tienes la alternativa de disimularlo, preocuparte o aceptarlo. La aceptación significa que, en realidad, no tienes que hacer nada al respecto.
Simplemente, respetas tu cuerpo y la inteligencia divina que está obrando sobre ti.
Cuando algún otro te indica que tienes un problema porque se está cayendo el pelo, ni siquiera te preocupas por la observación. La aceptación elimina de un plumazo la etiqueta de «problema».
No se trata aquí de una actitud fingida. Lo que haces es, simplemente, apartar al ego de tus valoraciones internas, centradas en la aprobación de los demás. Gracias a la autoaceptación, puedes decir honestamente: «Soy lo que soy y lo acepto». Una vez que hayas instalado firmemente esta actitud, desde una postura de honestidad contigo mismo, la certeza de que mereces recibir los dones del universo estará alineada con ese divino poder.
El autorechazo, en cambio, provoca un desajuste en la alineación con tu divinidad.
Solo tú puedes efectuar ese cambio. Se trata simplemente de cambiar tu percepción interna.
Wayne W. Dyer
Extracto del libro:
365 semillas de conciencia para una vida plena
Fotografías tomadas de Internet