La gente se ha vuelto completamente pasiva. Se escucha música, se lee un libro, se ve una película... ya no se participa en ninguna parte, se es un observador, un espectador. Toda la humanidad se ha visto reducida a simple espectadora.
Es como si otra persona estuviera haciendo el amor y tu miraras... y eso es lo que sucede. Toda la humanidad se han vuelto unos mirones. Otra persona hace las cosas y tú observas. Desde luego, estas fuera, de modo que no te involucras, no hay compromiso ni peligro. Pero ¿cómo puedes entender el amor al mirar cómo hace el amor otra persona?
Mi sensación es que la gente se ha vuelto espectadora de manera tan profunda, que cuando hace el amor es observadora. La gente ha empezado a hacer el amor a la luz... con todas las luces encendidas, rodeada de espejos para poder observarse hacer el amor. Hay personas que tienen instaladas cámaras fijas en sus dormitorios para poder sacar fotografías automáticamente, y luego mirarse cómo hacen el amor.
Cuando participas, algo irracional empieza a funcionar. Haz el amor y simplemente se como animales salvajes. Si escuchas música, baila... cuando la música se ha vuelto una danza, la razón queda aparcada a un costado. Y la razón solo puede ser espectadora, jamás participante. Siempre se sitúa en el lado seguro, observando desde algún sitio en el que no hay peligro.
De modo que encuentra cada día algo que puedas hacer sin pensar en ello. Excava un agujero en la tierra, eso bastará. Transpira bajo el sol caliente y excava... simplemente se el excavador. De hecho, los excavadores no, sino la excavación. Olvídate por completo de ti en la tarea. Participa, y de repente veras surgir una nueva energía.
Extracto del libro:
DÍA A DÍA
Osho
Día 237
Osho
Día 237
