domingo, 1 de febrero de 2015

VELOCIDAD


Cada uno posee su propia velocidad y debería moverse conforme a ella, a aquello que es natural para ti.

Una vez que alcances tu propio ritmo, podrás hacer mucho más. No será turbulento, irá con suavidad y podrás hacer mucho más. Hay trabajadores lentos, pero la lentitud posee sus propias cualidades. Y de hecho estas son mejores. Un trabajador veloz puede ser cuantitativamente bueno. Podrá producir más, cuantitativamente hablando, pero cualitativamente nunca podrá ser muy bueno. Un trabajador lento es cualitativamente más perfecto. Toda su energía penetra en una dimensión cualitativa. La cantidad quizá no sea mucha, pero eso tampoco es lo que realmente importa. 

Si puedes hacer algunas cosas, cosas realmente hermosas, casi perfectas, te sientes muy feliz y satisfecho. No hay necesidad de hacer muchas. Incluso si puedes hacer una sola cosa que te satisfaga totalmente, es suficiente; tu vida está realizada. Puedes seguir haciendo muchas cosas sin que nada te deje satisfecho y todo te ponga enfermo. ¿Qué sentido tiene? 

Hay que entender algunas cosas básicas. No existe nada llamado naturaleza humana. Hay tantas naturalezas humanas como seres humanos, de modo que no hay criterio.

Extracto del libro:
DÍA A DÍA
Osho
Día 267
Fotografía tomada de internet