domingo, 22 de febrero de 2015

VIEJA Y MEZQUINA


La mente no deja de encogerse... a medida que envejeces, la mente se vuelve más y más pequeña y más), más mezquina. No es fortuito que la gente mayor se vuelva un poco mezquina. 

Hay tantas personas mayores que siempre están enfadadas, irritadas, molestas, sin motivo en particular, y ello se debe a que han perdido el corazón en su vida. Han vivido solo con la mente, que no conoce ningún camino para expandirse; únicamente sabe encogerse, algo que nunca deja de hacer. Cuanto más sabes, más pequeña la mente que tienes. La persona ignorante posee una mente mayor que la persona culta, porque no tiene nada en la mente. No hay espacio. La persona instruida está demasiado llena de conocimiento; carece de espacio. Pero el corazón es otro nombre del espacio interior. 

Así como existe el espacio exterior -el cielo sin barreras, sin límites-, de la misma manera el cielo interior carece límites. Ha de ser así: si el exterior es infinito, el interior no puede ser finito. Debe equilibrar el exterior; es su otro polo. El cielo interior es tan grande como el exterior, de la misma proporción. 

La meditación no tiene que suceder en la cabeza... no puede suceder allí, y sea lo que fuere lo que tenga lugar allí, no es más que una imitación de la meditación. No es ni verdad ni real; lo real siempre acontece en el corazón. Así que recuordalo: cuando hablo de despertar, hablo del despertar del corazón. No debe entenderse únicamente como una doctrina; ha de experimentarse, ha de convertirse en vuestra estado existencial.

Extracto del libro:
DÍA A DÍA
Osho
Día 271
Fotografía tomada de internet