sábado, 25 de abril de 2015

VISLUMBRES


Siempre empieza con vislumbres, y es bueno que sea así; una súbita apertura del cielo sería demasiado, insoportable. 

A veces uno puede enloquecer si una comprensión tiene lugar súbitamente. A veces se puede ser lo bastante tonto como para entrar demasiado súbitamente en una comprensión, y entonces resulta peligroso, porque sería excesivo para ti; no podrías absorberla. La cuestión no radica en la comprensión, sino en cómo digerirla poco a poco, para que no sea una experiencia sino que se convierta en tu ser. 

Si es una experiencia, vendrá y se irá; nunca dejará de ser un vislumbre. Ninguna experiencia puede permanecer como algo permanente... solo tu ser puede serlo. 

Y no seas codicioso acerca de los asuntos interiores. Es malo incluso con los exteriores, y muy malo con los interiores. No es tan peligroso cuando eres codicioso con el dinero, el poder y el prestigio. Porque esas cosas simplemente son vanas, y que seas o no codicioso no marca una gran diferencia. Pero la codicia interior, cuando avanzas por un sendero interior, puede ser muy peligrosa. Muchas personas casi se han vuelto locas. Puede resultar demasiado deslumbrante a sus ojos y pueden cegarse. 

Siempre es bueno llegar e irse. Deja que sea un ritmo constante, para que nunca estés fuera del mundo y jamás en él. Poco a poco te darás cuenta de que lo trasciendes. Ha de ser algo gradual... del mismo modo en que una flor se abre tan gradualmente que no puedes ver cuándo ha tenido lugar realmente la apertura.

Extracto del libro:
DÍA A DÍA
Osho
Día 279
Fotografía tomada de internet