domingo, 27 de marzo de 2016

¿DÓNDE ESTÁ AHORA TU ANGELINA?


¿Quién es David y quién es Angelina? Me gustaría que me contestaras a estas preguntas. ¿Eres tú David? Si lo eres, ¿dónde está ahora tu Angelina? ¿Sigue contigo o te ha dejado? ¿Qué le has hecho? ¿Cómo la trataste? ¿La cuidaste bien? ¿Fuiste capaz de hacerla feliz? Hemos de hacernos estas preguntas. «¿Dónde está ahora mi Angelina? ¿Adónde se ha ido? ¿Qué le he hecho?». Estas son las preguntas importantes que nos ayudarán a observar a fondo la situación.

Lo cual es una meditación, una verdadera meditación. David podría ser tu pareja, o Angelina. Angelina podría ser un hombre o una mujer, y David también. Cuando Angelina entró en tu vida, al principio eras feliz de estar con ella, valorabas su presencia, creíste que con ella volverías a vivir, pero no pudiste mantener este conocimiento, te olvidaste de que Angelina era un regalo para ti. La hiciste sufrir tanto que te abandonó. Hubo una época en la que te rogó que practicaras los Cinco Ejercicios de Concienciación, pero debido a la fuerte energía habitual que hay en ti, nunca aceptase hacerlo. Te rogó que consumieras con moderación y que dejaras de fumar y beber. Te invitó a hablar con afecto, a escuchar profundamente y a relacionarte con personas buenas en vez de hacerlo con aquellos que regaban las semillas negativas que hay en ti. Pero nunca la escuchaste, seguiste con tu estilo de vida, empujado por tu energía habitual, por eso tuvo que dejarte.

Tu Angelina puede ser tu hija o tu hijo. Ella o él han entrado en tu vida. ¿Cómo los has tratado? ¿Eres capaz de vivir con tus hijos en armonía, paz y amor? ¿O estás teniendo dificultades con tu Angelina? Quizá tu Angelina se haya ido de casa. En la historia, David estuvo a punto de suicidarse al saber que Angelina se había ido, pero recordó las enseñanzas que había oído sobre la práctica de comunicarse por medio del incienso, y de repente su desesperanza se convirtió en esperanza. Creyó que si ofrecía el incienso de ser consciente y de la concentración, Angelina volvería. Tuvo una oportunidad para sentarse, pensar y reflexionar en su vida.

Extracto del libro:
LA IRA (El dominio del fuego interior)
Thich Nhat Hanh
Fotografía de Internet