martes, 16 de abril de 2019

LA MARIPOSA PERDIDA








Dijo un niño: "Dios, habla conmigo".


Y entonces una alondra del campo cantó, pero el niño no la escuchó.





El niño exclamó: "¡Dios, háblame!"


Y un trueno resonó por todo el cielo, pero el niño no lo escuchó.





El niño miró a su alrededor y dijo: "Dios, déjame mirarte".


Y una estrella se iluminó, radiante, pero el niño no se dio cuenta.





Y el niño gritó de nuevo: "Dios, Muéstrame un milagro".


Y una vida nació de un huevo, pero el niño no lo notó.





Llorando desesperadamente, dijo: "Tócame, Dios, para saber que estás conmigo".


Dios se inclinó y tocó al niño. Pero él se sacudió la mariposa.





Muchas veces las cosas que pasamos por alto son aquellas que hemos estado buscando.














Extracto del libro:


La culpa es de la vaca 1a parte


Lopera y Bernal


Fotografía de Internet