(Albert Einstein)
Prácticamente todas las religiones marcan lo que debe hacerse y en lo que debe creerse sin opción de ponerlo en duda. Pero ¿por qué no creer en que el propio ser humano puede ser espiritual en sí mismo?
Existen muchas diferencias entre lo religioso y lo espiritual, pero entre todas ellas podría afirmarse que la espiritualidad es acercarse a algo internamente supremo, mientras que ser religioso implica seguir los preceptos y los dogmas impuestos por otros.
Quizá el problema sea que la fe se nos ha intentado inculcar tradicionalmente por la fuerza, sin permitirnos elegir nuestro propio camino. Usa el sistema de la negación de otras opciones, y coarta la fundamental curiosidad que desde pequeños poseemos, y que a medida que crecemos vamos olvidando mientras seguimos las pautas sociales.
Nos alejamos de nuestra propia espiritualidad para acercarnos a lo dictado por la religión.
El científico Carl Sagan dijo al respecto: «La vida es solo un vistazo a las maravillas de este asombroso universo, y es triste que tantos la desperdicien con fantasías espirituales».
Nuestro Albert Einstein trató la espiritualidad de una forma tan directa en afirmaciones como «cuanto más avanza la evolución espiritual de la humanidad, más seguro me parece que el camino hacia la genuina religiosidad no reside en el miedo a la vida, y el miedo a la muerte, y la fe ciega, sino a través del esfuerzo del conocimiento racional».
Tomado del libro:
Einstein para despistados
Allan Percy
Fotografía de Internet