LA VIDA COMO AVENTURA EXTRAORDINARIA
Después de haber utilizado el Don de la Sabiduría para ver lo que se opone a ti (nada) y lo que te está invitando (todo), puedes aplicar la Alegría de la Maravilla. Esta fórmula dice así: «Todas las cosas están llenas de maravilla, pues la maravilla es la naturaleza de Dios, la esencia de la Divinidad y tu estado natural de ser. Entra en la maravilla que eres y, desde ese lugar de maravilla, imagínate tu futuro, tu vida y tu realidad colectiva en la próxima versión, la más grandiosa, de la visión más grande que hayas tenido nunca de Quién Eres. Con esto, difundes la maravilla por tu mundo y consigues el propósito para el que has venido al mundo.»
La Alegría de la Maravilla te otorga imaginación, permitiéndote tomar todo lo que te has atraído por medio de la Energía de Atracción y de la Ley de los Opuestos, y permitiéndote producir tu vivencia de ello de todas las maneras creativas que sólo puede evocar una rica imaginación.
Cuando aplicas la Energía de Atracción, la Ley de los Opuestos, el Don de la Sabiduría y la Alegría de la Maravilla para magnetizar, contextualizar, discernir y seleccionar lo que quieres vivir aquí mismo, ahora mismo, la vida se convierte en una aventura extraordinaria.
El modo en que se está creando ahora mismo tu vida sobre la tierra es consecuencia de todo esto. Si no te gusta alguna parte de lo que has creado, de manera individual o colectiva, puedes recrearla de nuevo... en la próxima versión, la más grandiosa, de la visión más grande que hayas tenido nunca de Quién Eres.
Cuanto mayor sea la creación, más poder hará falta para modificarla. Si se trata de que tienes hambre, podrás modificar esa creación con relativa facilidad. Si se trata del hambre en el mundo, hará falta más poder (es decir, más de ti) para alterar la creación, para recrearla de nuevo.
Es una cosa que la mayoría de los seres humanos no han estado dispuestos a hacer hasta ahora. Esta situación mundial, como otras creadas también por la humanidad, no existe porque no se pueda cambiar, sino porque no ha existido la voluntad colectiva de cambiarla.
Cuando hay voluntad de hacer algo, se encuentra el modo de hacerlo.
No tienes por qué sentirte desanimado eternamente por las circunstancias negativas que hayan prevalecido, ya sea en la vida colectiva de la humanidad o en tu propia vida individual.
Del libro:
Dios es felicidad
Convierte tu vida en una experiencia extraordinaria
Neale Donald Walsh
Foto tomada de internet