jueves, 16 de diciembre de 2021

CUANDO ÉRAMOS NIÑOS NOS "DROGARON"


Si tomamos a un niño pequeño, de unos seis meses de edad y le inyectamos 
repetidamente heroína o cualquier otra droga, después de un lapso todo el cuerpo del niño clamará por la droga. En lugar de ser criado con una alimentación buena y saludable, habrá sido criado con droga. De modo que, cuando se lo priva de la droga, el pobre niño sufre las agonías de la muerte.

¿Listos para una sorpresa? Esto es lo que nos sucedió, a ti y a mí, a todos nosotros. Nos drogaron... cuando éramos niños. No nos criaron con el alimento sano y saludable del juego y el trabajo, de la belleza y los placeres de los sentidos, y, cuando crecimos, del placer del intelecto. ¡Oh no! desarrollaron en nosotros el gusto por drogas llamadas "aprobación", "éxito", "hacerlo a la perfección", "alcanzar el éxito, la afirmación, el triunfo, la victoria" . Nos dieron poder, reputación, fama, prestigio. Nos dieron esta droga. Y, ¿sabes algo? Comenzamos a sentirnos bien.

Fue una especie de sensación de embriaguez, una magnifica sensación cuando nos aplaudían. Y empezamos a pensar que era magnífico ser famoso, exitoso, tratado con deferencia, popular. Resultado: cuando empezamos a crecer, ya nos podían controlar de la manera que querían. Todo lo que tienen que hacer ahora es retener la droga.

¡Chico, si no has pasado por esto, te saludo! No te aprueban... ¡Qué preocupado te sientes, qué intranquilo! Te critican, no te afirman... ¡Síntomas de abandono! Vuelves a rastras para buscar reafirmación... Y hay psicólogos que escriben libros en los que te dicen que así es como se debe ser. Así es como "debe" ser: más droga, más control.



Extracto del libro:
Redescubrir la vida
Anthony de Mello
Fotografías tomadas de Internet