Mira a las madres, ¡simplemente obsérvalas, y sentirás que están tratando de dominar a sus hijos pequeños.
Su agresividad, su ira, se vuelve sobre ellos: los niños se han convertido en objetos de catarsis; y con esto ya están cargados. Entrarán en la vida llevando montañas desde el mismo comienzo, y nunca sabrán que es posible la vida sin llevar la cabeza tan cargada; y nunca conocerán la libertad que llega con un ser no cargado. Nunca sabrán que cuando no estás cargado tienes alas y puedes volar al cielo y en lo Desconocido.
Y Dios sólo es asequible cuando no estás cargado. Pero ellos nunca lo sabrán. Llamarán a las puertas de los templos, pero nunca sabrán dónde existe el templo real. El templo real es la libertad, morir al pasado momento a momento y vivir el presente. Y libertad para moverse, para moverse en la oscuridad, en lo Desconocido: ¡esa es la puerta de lo Divino!
Osho.
Fuente Osho Despierta