Entregarse a algo más grande que ustedes dos... eso es el Dios del amor:
En sí mismo el mito de que hay, un Dios del amor es hermoso, es una comprensión tremenda. Entonces dos amantes pueden entregarse al Dios y mantenerse independientes. Y cuando eres independiente hay belleza... de lo contrario te conviertes en una sombra. Si la pareja se convierte en una sombra, en ese mismo momento empezaras a perder interés en ella... ¿quién ama a una sombra? Si te conviertes en una sombra, tu pareja empezará a perder interés en ti. Queremos amar a verdaderos seres humanos, no a sombras.
No hace falta transformarse en la sombra de nadie. Sigue siendo tu mismo, y que tu pareja haga lo mismo. De hecho, al entregarte al Dios del amor, te vuelves auténtico. Y nunca eres tan auténtico como cuando te vuelves auténtico por primera vez. Dos seres auténticos pueden amar muy profundamente... y luego ya no existe la necesidad de contenerse.
Deja que subraye esta idea: cuando te entregas al Dios del amor, ya no es tan importante si tu pareja se queda, te deja o tú te vas. Lo importante es que el amor permanece. Tu entrega es al amor, no a la pareja. De modo que la única cuestión es no traicionar el amor. Los amantes pueden cambiar, el amor puede permanecer. En cuanto has entendido esto, el miedo desaparece.
Extracto del libro:
DÍA A DÍA
Osho
Día 223
Osho
Día 223